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son muy diferentes en el campo y fuera de él, pero les une la lucha por llegar lejos en el Atlético de Madrid. Ignacio Camacho y Álvaro Domínguez ya han cumplido el sueño de todos los canteranos de la institución: debutar con la camiseta rojiblanca y formar parte de la primera plantilla del equipo que dirige Javier Aguirre. Compañeros en el vestuario y amigos fuera de él, Camacho y Domínguez han sabido madurar y aprovechar las oportunidades que les ha brindado el técnico mexicano.
La entidad del Manzanares siempre ha intentado que la cantera surta de nuevos jugadores al primer equipo, y aunque a veces este objetivo se presenta difícil por los movimientos del mercado actual, la cantera rojiblanca es una de las más fructíferas de Primera División. Camacho y Domínguez son dos claros ejemplos de la nueva etapa que están viviendo las categorías inferiores de la casa.
Álvaro Domínguez ha sido la última ‘adquisición’ de Javier Aguirre para el primer equipo. Este central ha convencido al técnico mexicano con su saber estar y seguridad en el centro de la zaga. Con tan sólo 19 años, Álvaro asegura que “estoy muy contento de poder formar parte del primer equipo del Atlético de Madrid. Mi objetivo siempre ha sido llegar aquí. Soy consciente de que muchos canteranos quieren estar donde yo estoy ahora mismo, por lo que mi objetivo en estos momentos es trabajar más y más y aprovechar todas las oportunidades que se me presenten”.
El madrileño, al que su propio compañero define como una gran persona, responsable y amigo de sus amigos, no quiso olvidar la figura del entrenador del filial rojiblanco, Abraham García, al que define como “un referente en la forma de trabajar. Abraham ha sido una persona importante en estos últimos años. Él siempre me ha dicho que confíe en mí mismo y dé lo mejor en el campo. Agradezco mucho las palabras que me dijo Abraham cuando acudí a la llamada del primer equipo. Era importante para mí que me dijera que estuviera tranquilo y que lo hiciera en el primer equipo como lo solía hacer en el filial”.
“Es difícil dar el paso al primer equipo. Comienzas a convivir con grandes jugadores, con estrellas e impresiona, pero te acostumbras. Estoy viviendo experiencias nuevas cada día y poco a poco espero ir aprendiendo más de todos ellos”, reconoce Álvaro.
Camacho, por su parte, ya se puede considerar un veterano con sólo 18 años. El futbolista maño recuerda con cariño su debut ante el Barcelona en el Vicente Calderón la pasada temporada. Un partido en el que demostró que no le asusta tomar el mando en situaciones complicadas. Él mejor que nadie entiende las sensaciones que ha vivido Domínguez en los últimos meses. “Yo le expliqué desde el primer momento cómo viví un momento que él compartió. Todos los compañeros, y yo el primero, estamos para que su adaptación sea lo más rápida posible. Y no sólo en el campo, también fuera de él”, asegura.
“Recuerdo con mucho cariño el momento de mi debut; fue ante el Barcelona y la verdad es que fue un momento perfecto. El equipo no estaba pasando por un buen momento y el entrenador me dio la oportunidad que tanto esperaba. Me tocó debutar contra un equipo grande y eso no asusta; al contrario, se agradece porque esos partidos son muy bonitos de jugar”, recuerda Ignacio Camacho.
Ambos canteranos juegan en posiciones “complicadas”, como ellos mismos subrayan, y en las que el Atlético de Madrid en los últimos años ha recibido algunas críticas. “Creo que el Atlético de Madrid tiene grandes jugadores en todas las posiciones, tanto en el centro del campo como en defensa. Perea y Pablo siempre han sido dos referentes en la defensa del Atlético y esta temporada se ha reforzado mucho con Ujfalusi y Heitinga, jugadores internacionales con mucha experiencia y que saben hacer las cosas. Es verdad que tanto Ignacio como yo jugamos en posiciones complicadas en las que tienes mucha responsabilidad y en algunos momentos tienes que echarte el equipo a la espalda”, dice el central.
Dar el ‘gran paso’ no es sencillo y muchos futbolistas lo acusan, algo que no ha pasado en el caso de estos dos chavales. La responsabilidad, las ganas y, por supuesto, la calidad que atesoran han sido valores suficientes para abrir las puertas de la Primera División. “El cambio de una categoría a otra es brusco porque en el filial trabajas de un forma semi-profesional, ya que estás en un periodo de formación. En cambio, en el primer equipo te encuentras con jugadores profesionales que lo han vivido todo. Es diferente la manera de trabajar, el control que hay con cada jugar y la responsabilidad que adquieres”, asegura Álvaro.
“Si estás algunos años en el filial y pasa el tiempo y ves que no hay respuesta por parte de la entidad, siempre hay un momento en el que te planteas si estás haciendo las cosas bien, pero no llegas a cansarte. En competiciones como la Copa del Rey, o por otras circunstancias, los equipos suelen tirar de la cantera; por ello, algún día te va a llegar la oportunidad seguro”, subraya por su parte Camacho.
Álvaro Domínguez se muestra contento y satisfecho por el momento que está viviendo. “Espero mejorar mucho y aprender de los que tengo a mi lado. La verdad es que estoy disfrutando de lo que estoy viviendo ahora mismo con la camiseta del Atlético de Madrid. He cumplido el sueño de jugar con el primer equipo y espero continuar ayudando en lo que pueda”, señala el canterano, añadiendo que “comparto vestuario cada día con gente que se ha consagrado en el fútbol internacional. Me han recibido muy bien y me han ayudado en todo momento desde que me incorporé. Son grandes dentro y fuera del terreno de juego y eso es muy importante”.
Tanto Camacho como Domínguez reconocen la buena política del Club respecto a la cantera. “Viene una buena época para la cantera. Está claro que este Club está apostando por la gente de la casa, jugadores jóvenes con muchas ganas. Creo que es una buena política la que sigue el Atlético de Madrid; al final sacar buenos futbolistas de esta cantera es un beneficio para el Club, que tiene que sacar el máximo beneficio de ellos”, dice el mediocampista rojiblanco, que apostilla que “no podemos negar que en la mayoría de los equipos es complicado jugar saliendo de la cantera. Siempre hay partidos en los que los entrenadores cuentan con los chavales de la cantera y esas oportunidades no hay que dejarlas escapar, hay que agarrarlas con fuerza. Domínguez tiene mucha calidad y seguro que se quedará con nosotros”.
Por su parte, Álvaro Domínguez afirma que “el objetivo de la cantera del Atlético de Madrid es formar jugadores para que puedan alcanzar el primer equipo, y si no puede ser que lo hagan en otros clubes de la misma categoría”.
Javier Aguirre confió plenamente en las cualidades de Ignacio Camacho y repitió con Álvaro Domínguez. “Para mí es un orgullo que tanto Javier Aguirre como Nacho Ambriz quieran contar conmigo. Intento agradarles siempre con lo que hago en el campo y trabajo para que esa confianza obtenga resultados”, aclara el defensa madrileño.
A pesar de su juventud, Camacho es consciente de que esta temporada la competencia es mayor que la pasada y que los minutos están más caros. El de Zaragoza confía en sus posibilidades y sabe que antes o después todos los futbolistas de la plantilla gozarán de minutos. “Todo el mundo te pregunta sobre la situación que vives, si es diferente a la de la temporada pasada. Creo que un futbolista, por joven que sea, tiene que estar acostumbrado a eso. El jugador siempre quiere jugar, independientemente de la edad que tenga y de la situación que viva. Lo he repetido un montón de veces y lo que debo hacer ahora es trabajar mucho en cada entrenamiento para ganarme un puesto en el equipo, como el resto de mis compañeros”, confiesa.
Ignacio no quiso perder la oportunidad de comentar que “es normal que el equipo reciba críticas si no logra los resultados que todos queremos. Los jugadores somos conscientes de que la gente quiere ver goles y buen fútbol. Estamos seguros de que transformaremos esos pitos que se escuchan alguna vez por aplausos”.
Los planes de futuro a corto y largo plazo para estos dos jugadores son claros: seguir trabajando y aprovechar sus oportunidades. “Los chavales que están en las categorías inferiores del Club tienen que confiar en sus posibilidades. Nosotros, como ellos, hemos pasado por esos momentos y es bonito. Hay que tener paciencia y esperar la oportunidad que te permita dar el salto. Lo que tienen que tener muy claro es que una vez que forman parte de la primera plantilla tienen que trabajar más duro, pues aún nos queda un largo camino que recorrer. Hay que ser constantes y mantener la cabeza fría”, comenta Álvaro.
Mientras, Camacho dice para acabar que “personalmente me gustaría afianzarme en el Atlético y hacer las cosas bien, que todo el mundo pueda estar orgulloso de lo que haga en el campo. No quiero dejar escapar ninguna de las oportunidades que me dé el míster porque gracias a él estoy aquí”.
La entidad del Manzanares siempre ha intentado que la cantera surta de nuevos jugadores al primer equipo, y aunque a veces este objetivo se presenta difícil por los movimientos del mercado actual, la cantera rojiblanca es una de las más fructíferas de Primera División. Camacho y Domínguez son dos claros ejemplos de la nueva etapa que están viviendo las categorías inferiores de la casa.
Álvaro Domínguez ha sido la última ‘adquisición’ de Javier Aguirre para el primer equipo. Este central ha convencido al técnico mexicano con su saber estar y seguridad en el centro de la zaga. Con tan sólo 19 años, Álvaro asegura que “estoy muy contento de poder formar parte del primer equipo del Atlético de Madrid. Mi objetivo siempre ha sido llegar aquí. Soy consciente de que muchos canteranos quieren estar donde yo estoy ahora mismo, por lo que mi objetivo en estos momentos es trabajar más y más y aprovechar todas las oportunidades que se me presenten”.
El madrileño, al que su propio compañero define como una gran persona, responsable y amigo de sus amigos, no quiso olvidar la figura del entrenador del filial rojiblanco, Abraham García, al que define como “un referente en la forma de trabajar. Abraham ha sido una persona importante en estos últimos años. Él siempre me ha dicho que confíe en mí mismo y dé lo mejor en el campo. Agradezco mucho las palabras que me dijo Abraham cuando acudí a la llamada del primer equipo. Era importante para mí que me dijera que estuviera tranquilo y que lo hiciera en el primer equipo como lo solía hacer en el filial”.
“Es difícil dar el paso al primer equipo. Comienzas a convivir con grandes jugadores, con estrellas e impresiona, pero te acostumbras. Estoy viviendo experiencias nuevas cada día y poco a poco espero ir aprendiendo más de todos ellos”, reconoce Álvaro.
Camacho, por su parte, ya se puede considerar un veterano con sólo 18 años. El futbolista maño recuerda con cariño su debut ante el Barcelona en el Vicente Calderón la pasada temporada. Un partido en el que demostró que no le asusta tomar el mando en situaciones complicadas. Él mejor que nadie entiende las sensaciones que ha vivido Domínguez en los últimos meses. “Yo le expliqué desde el primer momento cómo viví un momento que él compartió. Todos los compañeros, y yo el primero, estamos para que su adaptación sea lo más rápida posible. Y no sólo en el campo, también fuera de él”, asegura.
“Recuerdo con mucho cariño el momento de mi debut; fue ante el Barcelona y la verdad es que fue un momento perfecto. El equipo no estaba pasando por un buen momento y el entrenador me dio la oportunidad que tanto esperaba. Me tocó debutar contra un equipo grande y eso no asusta; al contrario, se agradece porque esos partidos son muy bonitos de jugar”, recuerda Ignacio Camacho.
Ambos canteranos juegan en posiciones “complicadas”, como ellos mismos subrayan, y en las que el Atlético de Madrid en los últimos años ha recibido algunas críticas. “Creo que el Atlético de Madrid tiene grandes jugadores en todas las posiciones, tanto en el centro del campo como en defensa. Perea y Pablo siempre han sido dos referentes en la defensa del Atlético y esta temporada se ha reforzado mucho con Ujfalusi y Heitinga, jugadores internacionales con mucha experiencia y que saben hacer las cosas. Es verdad que tanto Ignacio como yo jugamos en posiciones complicadas en las que tienes mucha responsabilidad y en algunos momentos tienes que echarte el equipo a la espalda”, dice el central.
Dar el ‘gran paso’ no es sencillo y muchos futbolistas lo acusan, algo que no ha pasado en el caso de estos dos chavales. La responsabilidad, las ganas y, por supuesto, la calidad que atesoran han sido valores suficientes para abrir las puertas de la Primera División. “El cambio de una categoría a otra es brusco porque en el filial trabajas de un forma semi-profesional, ya que estás en un periodo de formación. En cambio, en el primer equipo te encuentras con jugadores profesionales que lo han vivido todo. Es diferente la manera de trabajar, el control que hay con cada jugar y la responsabilidad que adquieres”, asegura Álvaro.
“Si estás algunos años en el filial y pasa el tiempo y ves que no hay respuesta por parte de la entidad, siempre hay un momento en el que te planteas si estás haciendo las cosas bien, pero no llegas a cansarte. En competiciones como la Copa del Rey, o por otras circunstancias, los equipos suelen tirar de la cantera; por ello, algún día te va a llegar la oportunidad seguro”, subraya por su parte Camacho.
Álvaro Domínguez se muestra contento y satisfecho por el momento que está viviendo. “Espero mejorar mucho y aprender de los que tengo a mi lado. La verdad es que estoy disfrutando de lo que estoy viviendo ahora mismo con la camiseta del Atlético de Madrid. He cumplido el sueño de jugar con el primer equipo y espero continuar ayudando en lo que pueda”, señala el canterano, añadiendo que “comparto vestuario cada día con gente que se ha consagrado en el fútbol internacional. Me han recibido muy bien y me han ayudado en todo momento desde que me incorporé. Son grandes dentro y fuera del terreno de juego y eso es muy importante”.
Tanto Camacho como Domínguez reconocen la buena política del Club respecto a la cantera. “Viene una buena época para la cantera. Está claro que este Club está apostando por la gente de la casa, jugadores jóvenes con muchas ganas. Creo que es una buena política la que sigue el Atlético de Madrid; al final sacar buenos futbolistas de esta cantera es un beneficio para el Club, que tiene que sacar el máximo beneficio de ellos”, dice el mediocampista rojiblanco, que apostilla que “no podemos negar que en la mayoría de los equipos es complicado jugar saliendo de la cantera. Siempre hay partidos en los que los entrenadores cuentan con los chavales de la cantera y esas oportunidades no hay que dejarlas escapar, hay que agarrarlas con fuerza. Domínguez tiene mucha calidad y seguro que se quedará con nosotros”.
Por su parte, Álvaro Domínguez afirma que “el objetivo de la cantera del Atlético de Madrid es formar jugadores para que puedan alcanzar el primer equipo, y si no puede ser que lo hagan en otros clubes de la misma categoría”.
Javier Aguirre confió plenamente en las cualidades de Ignacio Camacho y repitió con Álvaro Domínguez. “Para mí es un orgullo que tanto Javier Aguirre como Nacho Ambriz quieran contar conmigo. Intento agradarles siempre con lo que hago en el campo y trabajo para que esa confianza obtenga resultados”, aclara el defensa madrileño.
A pesar de su juventud, Camacho es consciente de que esta temporada la competencia es mayor que la pasada y que los minutos están más caros. El de Zaragoza confía en sus posibilidades y sabe que antes o después todos los futbolistas de la plantilla gozarán de minutos. “Todo el mundo te pregunta sobre la situación que vives, si es diferente a la de la temporada pasada. Creo que un futbolista, por joven que sea, tiene que estar acostumbrado a eso. El jugador siempre quiere jugar, independientemente de la edad que tenga y de la situación que viva. Lo he repetido un montón de veces y lo que debo hacer ahora es trabajar mucho en cada entrenamiento para ganarme un puesto en el equipo, como el resto de mis compañeros”, confiesa.
Ignacio no quiso perder la oportunidad de comentar que “es normal que el equipo reciba críticas si no logra los resultados que todos queremos. Los jugadores somos conscientes de que la gente quiere ver goles y buen fútbol. Estamos seguros de que transformaremos esos pitos que se escuchan alguna vez por aplausos”.
Los planes de futuro a corto y largo plazo para estos dos jugadores son claros: seguir trabajando y aprovechar sus oportunidades. “Los chavales que están en las categorías inferiores del Club tienen que confiar en sus posibilidades. Nosotros, como ellos, hemos pasado por esos momentos y es bonito. Hay que tener paciencia y esperar la oportunidad que te permita dar el salto. Lo que tienen que tener muy claro es que una vez que forman parte de la primera plantilla tienen que trabajar más duro, pues aún nos queda un largo camino que recorrer. Hay que ser constantes y mantener la cabeza fría”, comenta Álvaro.
Mientras, Camacho dice para acabar que “personalmente me gustaría afianzarme en el Atlético y hacer las cosas bien, que todo el mundo pueda estar orgulloso de lo que haga en el campo. No quiero dejar escapar ninguna de las oportunidades que me dé el míster porque gracias a él estoy aquí”.
